
El visado de no inmigrante L-1A es un visado de no inmigrante que permite a las empresas estadounidenses trasladar a empleados ejecutivos o directivos de una de sus oficinas extranjeras afiliadas a una de sus oficinas en Estados Unidos. Esta clasificación también permite a una empresa extranjera que aún no tenga una oficina estadounidense afiliada enviar a un ejecutivo o directivo a Estados Unidos con el fin de establecer una.
Requisitos
Para poder optar a un visado L-1A, el empleado debe:
Haber trabajado para una empresa afiliada al empleador estadounidense en un país extranjero como ejecutivo o directivo de alto nivel, o dirigido una función esencial de la empresa durante al menos un año en los tres años anteriores al traslado.
Estar empleado como directivo o ejecutivo en la oficina de EE.UU.
El empresario debe tener una relación cualificada con una empresa extranjera (empresa matriz, sucursal, filial o afiliada, denominadas colectivamente organizaciones cualificadas).
El empleador debe estar actualmente, o estará, haciendo negocios como empleador en los Estados Unidos y en al menos otro país directamente o a través de una organización calificada durante la duración de la estancia del beneficiario en los Estados Unidos como L-1.
Proceso de solicitud
El empleador debe presentar un Formulario I-129, Petición para un Trabajador No Inmigrante, con tasas, en nombre del empleado. La petición debe incluir documentación acreditativa, como pruebas de las cualificaciones del empleado y de la relación del empleador con la empresa extranjera.
Si se aprueba la petición, se emitirá al empleado una Notificación de Acción I-797, que sirve como prueba de su estatus L-1A. A continuación, el empleado puede solicitar un visado en una embajada o consulado de Estados Unidos.
Duración de la estancia
Los visados L-1A se conceden inicialmente por un periodo de tres años, pero pueden prorrogarse hasta un total de siete años.
Cónyuges e hijos
Los cónyuges e hijos de titulares de visados L-1A pueden optar a visados L-2, que les permiten vivir y trabajar en Estados Unidos.
El sistema de inmigración de EE.UU. puede ser complejo, y es importante consultar con un abogado de inmigración con experiencia para discutir su elegibilidad y opciones.